Academia musical es un canal que pretende difundir el conocimiento de las áreas docentes de la música (teoría, armonía, contrapunto, orquestación, etc.) desde un punto de vista clásico y con arreglo a la tradición didáctica mas contrastada.
La Claves, también denominadas Llaves, son unos signos que nos sirven para determinar el nombre de las notas y la altura del sonido que corresponde a cada una de las líneas y de los espacios que conforman el pentagrama. Esto no quiere decir otra cosa que: si colocamos sin más una nota cualquiera dentro de un pentagrama, sin especificar Clave o Llave alguna, esa nota no tendrá nombre, no representará a ninguna nota en particular, ya que, de hecho, podrá representar a cualquiera de las siete notas, es decir, podrá ser un “do”, pero también podrá ser un “re”, o un “mi”, o un “fa”, “sol”, “la” o “si”.
Tipos de Clave existentes
Veamos un ejemplo de cómo dependiendo de qué Clave pongamos al principio, esa nota que acabamos de colocar podrá ser cualquiera de las siete notas musicales:
Dependiendo de la Clave, una nota puede ser cualquiera de las siete existentes
Por ello es imprescindible poner una Clave al principio del pentagrama, porque esa Clave será la que nos dé la referencia fundamental para poder otorgarle un nombre y altura específicos a las notas que coloquemos sobre él.
Las Claves llevan siempre el nombre de una de estas tres notas: “sol”, “fa” y “do”, y tendremos que colocarlas, de forma obligatoria, en las líneas del pentagrama, nunca sobre los espacios. Las Claves dan su nombre a la línea en que se han colocado, lo que implica que por extensión dan nombre al resto de las notas que pongamos sobre el pentagrama. Pongamos un ejemplo, al poner la “Clave de sol” sobre la segunda línea del pentagrama, estamos indicando que cada vez que veamos una nota sobre la segunda línea del pentagrama, esa nota será una nota “sol”, si la nota está sobre el espacio justo debajo de la segunda línea, entonces la nota será un “fa”, pero si nos encontramos una nota en el espacio justo encima de la segunda línea del pentagrama, entonces esa nota será un “la”, si es sobre la tercera línea será una nota “si” y así sucesivamente, tanto en dirección ascendente, como en dirección descendente.
La Clave da nombre a la línea en que se ha colocado
Es altamente recomendable que la Clave encabece cada pentagrama, en todo el transcurso y extensión de una composición.
La “Clave de sol es”, sin duda, la Clave más habitualmente utilizada en la música. Las partituras para una gran mayoría de instrumentos musicales se escriben en “Clave de sol”. La Clave está representada por un reconocible signo, cuyo trazo más representativo es la curva con la que éste comienza, la cual, arrancando desde la 2ª línea, la rodea, sirviendo, además, para indicar que es esta la línea afectada por la Clave, o, dicho de otro modo, la que indica que la nota que se encuentre ubicada en esta línea del pentagrama, será una nota “sol”.
En Clave de sol, una nota colocada sobre la segunda línea es una nota sol
Una pequeña variante muy utilizada a la grafía habitual de la “Clave de sol”, es la de añadir, después del signo de Clave, un punto en el espacio superior y otro en el inferior de la segunda línea, de forma que esta quede ubicada entre ellos, con lo cual se despeja cualquier duda respecto a cuál es la línea señalada por la Clave.
Toda vez que la “Clave de sol” ya nos ha indicado que la nota que se coloque en la segunda línea del pentagrama será una nota “sol”, en el resto de líneas y espacios se ubicarán el resto de notas, por orden de sucesión inmediata, ya sea ascendente o descendente, según correspondan. Veamos un ejemplo:
Ubicación de las notas en la Clave de sol en 2ª línea
En el caso de la “Clave de fa”, su signo representativo, el que indica la línea afectada por la clave, es también la curva con la que ésta comienza, la cual, arrancando desde la 4ª línea, la rodea.
Si bien en el caso de la “Clave de sol”, los dos puntos que delimitan su segunda línea, indicando cuál es la línea afectada por la clave, son optativos, se pueden poner o no según nuestro criterio, en el caso de la “Clave de fa”, estos puntos no se deben obviar; se escribirán siempre.
Representación gráfica de la Clave de Fa en 4ª línea
Si la “Clave de fa” nos está indicando que en la 4ª línea estará escrita la nota “fa”, las demás notas las ubicaremos en las restantes líneas y espacios de tal forma:
Ubicación de las notas en la Clave de fa en 4ª línea
Las líneas adicionales, también denominadas “suplementarias”, son unas rayas cortas que se escriben tanto por encima como por debajo del pentagrama, y que son tanto paralelas como equidistantes a las líneas del mismo.
Las líneas adicionales no son más que una ampliación del pentagrama, cuya utilidad principal es la de aumentar el número de líneas y espacios del mismo, proporcionándonos un medio mediante el cual poder escribir las notas más agudas que la que corresponde a la 5ª línea del pentagrama y poder escribir las notas más graves que la correspondiente a la 1ª línea.
Las líneas adicionales amplían el número de líneas y espacios
Cuando escribimos notas en las líneas adicionales, debemos tener en cuenta las siguientes normas:
En primer lugar, si la nota tiene que estar en una línea adicional, ésta debe atravesarla.
La línea adicional debe atravesar la nota colocada en ella
En segundo lugar, si la nota tiene que estar en un espacio adicional, éste se deja sin línea que lo delimite por su parte superior, ya que no se ponen nunca más líneas adicionales que las estrictamente indispensables, y las líneas destinadas a cubrir un espacio no reciben tal consideración.
Forma incorrecta de delimitar espacios adicionales
Forma correcta de delimitar espacios adicionales
Por último, la longitud de las líneas adicionales no debe sobrepasar de la necesaria para cubrir una sola nota. En el caso de que existan varias líneas adicionales seguidas, han de escribirse de forma independiente, separadas unas de las otras.
Forma incorrecta de colocar líneas adicionales seguidas
Forma correcta de colocar líneas adicionales seguidas
Al ser las líneas adicionales una prolongación del pentagrama, el orden de sucesión de las notas es exactamente el mismo que en éste, dicho de otro modo, se sigue respetando la misma alternancia de líneas y espacios a la hora de colocar las notas. Veamos un ejemplo: en un pentagrama con Clave de sol en 2ª línea, una vez superada la 5ª línea, se forma el primer espacio adicional, que, en dicha Clave de sol, se corresponde con la nota “sol”; luego vendrá la primera línea adicional, que será la nota “la”; después vendrá el segundo espacio adicional, en el que se colocará la nota “si”, y así sucesivamente. Si nos vamos a la parte inferior del pentagrama, debajo de la 1ª línea se colocará la nota “re”; en la primera línea adicional pondremos la nota do y de nuevo continuaremos así sucesivamente.
Ejemplo del orden de sucesión de las notas en las líneas y espacios adicionales
Si escribimos una nota “do” con una línea adicional superior en un pentagrama en Clave de fa en 4ª línea, y escribimos a su vez una nota “do” con una línea adicional inferior en un pentagrama en Clave de sol en 2ª línea, dicha nota “do” es exactamente la misma nota, tanto en nombre, como en altura y en sonido.
Comentarios
Publicar un comentario